Spa & Bienestar

En la tierra de los centenarios, donde el mar acuna la arena dorada y los vientos cuentan historias milenarias, se encuentra nuestro oasis de bienestar, un spa envuelto en el generoso abrazo de Cerdeña.
Entre las piedras milenarias y los envolventes aromas a mirto y lentisco, cada paso es un viaje hacia la paz y la serenidad. Nuestros huéspedes cruzan el umbral hacia un lugar donde el tiempo se detiene, donde la respiración se hace profunda y el alma redescubre su melodía.
Aquí, la tecnología baila con la poesía, y el saber antiguo da la mano a la innovación.
Bienvenido al lugar donde la magia de Cerdeña se funde con la ciencia del bienestar, donde cada momento es un regalo precioso y una promesa de longevidad.

Le dará la bienvenida un jacuzzi interior, perfecto para aliviar la tensión muscular y fortalecer los sentidos. Déjese envolver por el calor relajante de la sauna o el baño turco, o sorpréndase con la refrescante cascada de hielo, que estimulará su circulación y tonificará su piel.

Para disfrutar de un momento de puro relax, la zona de relajación con té de hierbas ofrece un refugio sereno donde podrá desconectar tomando un té de hierbas rejuvenecedor. Las cabinas para parejas y de hidromasaje ofrecen la oportunidad de compartir este momento de bienestar con su pareja, mientras que nuestros expertos terapeutas estarán encantados de mimarle con una amplia gama de masajes y tratamientos personalizados, diseñados específicamente para satisfacer sus necesidades. 

Regeneración total de cuerpo y alma

Descubra una nueva dimensión de relajación y placer

Ríndase a la tranquilidad de nuestro spa y déjese mimar

Le damos la bienvenida a un mundo de bienestar y serenidad

Baño turco
El baño turco, con sus vapores aromáticos, envuelve el cuerpo en un delicado velo de humedad. La respiración se vuelve profunda y regular, mientras la mente se libera de pensamientos. La piel absorbe la humedad, se vuelve suave y brillante, mientras los músculos se relajan en un abrazo de calor húmedo.

Ducha emocional
La ducha fría emocional, con su chorro tonificante, despierta el cuerpo y lo prepara para la vuelta a la temperatura ambiente. Es una experiencia de contrastes, de pasar del calor al frío, que estimula la circulación e infunde vitalidad.

Piscina con hidromasaje
En el calor envolvente del agua, a una suave temperatura de 34 grados, el peso de las preocupaciones desaparece, mientras los músculos se deshacen como pétalos de rosa al sol. Entre los chorros de agua que danzan, el cuerpo encuentra un refugio, un oasis de paz en el que dejarse llevar por la corriente de la tranquilidad.
En esta piscina envuelta en una atmósfera poética, uno se entrega al suave fluir de las emociones, dejándose llevar por la armonía que impregna cada rincón. Aquí, el alma se encuentra a sí misma, se renueva y encuentra la paz y el descanso tan anhelados.

Zona de relax y té
En la zona de relax se encuentra refugio y refresco tras el sensual viaje a través del fuego y el hielo. Entre cómodas tumbonas y envolventes fragancias, podrá contemplar su ser con serenidad, sorbiendo infusiones perfumadas con hierbas sardas, que calman el alma y nutren el espíritu con el suave abrazo de la naturaleza.